Anécdotas, Cuentos, Historias

domingo, 28 de octubre de 2012

Sinfonía Numero IV


EN QUINTA DE MA (amores, desamores y  un vinculo  con New Orleans)

Entierro Con banda  de músicos.

Los músicos  y artistas en general en todo el mundo, se han caracterizado por ser bohemios, enamorados y parranderos; y no es para menos debido a  su profesión.  Por supuesto nuestros músicos locales no  se quedan atrás de estas faenas amorosas múltiples que de  lugar en lugar se van dando mientras descansan después de sus presentaciones.

Cuando la banda municipal de Miraflores,  cambio   de director por  orden del  alcalde; llego  a dirigir a los músicos un nuevo director, el profesor Aguirre, quien   por amor, o descuido; dejo en estado de gravidez   a  una  paisana que se enamoro de su música y de su  batuta.

Cuando este  se dio cuenta de su responsabilidad paternal, se fue del pueblo, dejando a la dama  y a la banda del pueblo solas y abandonadas; por lo que las dos quedaron como barco  a la deriva, con tripulación y sin capitán; luego  los músicos al ver  este gran titanic musical a la deriva, deciden  buscar de manera particular a otro director; mismo que llego procedente de Simijaca, y justo para una semana santa en donde había un compromiso con la curia para acompañar  todos los eventos de la semana mayor.
Carlos Julio Mora Integrante de  la banda Municipal 

En esta semana  mayor los ritmos que se ejecutaban,  eran tipo marcha fúnebre y  uno que otro de tipo marcial, siendo más alegres los que se ejecutaban en la semana de pascua; este director llego con mucho ímpetu, mucha exigencia y disciplina, lo que llevo a  esta banda a mejorar cada vez más en todas sus interpretaciones que hacían; siendo la pretensión del  director ser el mejor de la región con todo su equipo, pero  además también quería ser profesor de música del colegio, director de planta de la banda municipal y formar una buena orquesta con todo  ese recurso humano que había en la banda local y el pueblo.

Pero desafortunadamente ocurrió lo que ocurre cuando la política y los politiqueros meten la nariz  en algo y más  cuando no tienen  ni idea  de la importancia de la música en la cultura de un pueblo;  cuando el alcalde de turno recibió la solicitud de parte de los  integrantes de la  banda para que este  señor de Simijaca fuera el director; la rehusó argumentando que  era de filiación conservadora  y que por lo tanto no era conveniente tenerlo allí con tamaño de pretensiones,  en premio de consolación, buscaron a un nuevo director , que  era pensionado de la banda  de músicos del departamento, oriundo de Jenesano y  de filiación liberal;  nuevamente, ocurrió  que el alcalde  también pensó que  la música se podía ejecutar en quinta de MA y  fallo en su premio de consolación, porque el  director liberal de Jenesano, era un gran músico que ejecutaba  muy bien el clarinete, pero de dirección poco  o nada.

Luego la  disciplina y el orden no fue lo mejor a pesar de la buena voluntad del director; pues  ocurría que  todos como se dice en buen colombiano “le mamaban gallo”, y le tomaban del pelo  musicalmente con frecuencia sin que este se diera por enterado,  es decir mientras ejecutaban el bunde tolimense, otros  al tiempo dentro  de la misma  pieza interpretaban  notas del himno nacional y del barcino, al finalizar el  director les felicitaba a todos  y manifestaba  lo orgulloso que  se sentía por que la banda  de músicos  estaba sonando cada día  mucho mejor; lo que dio  a entender a todos los integrantes, que este director como muchos otros personajes locales pensaba que la música se podía ejecutar en quinta de MA.

En esa época estaba de moda  una  canción llamada “Tu no vales nada”  “quisiera matarte para que no sigas engañandoooo…… pero te perdono  porque tu no vales los cincuentaaa, que yo gaste un plomo en tu vida sinvergüenzaaaa…. Ayyyy  no vales ni un plomo que yo dispare para matarteeee, tu no vales nada vete de  aquí para no mirarteeeeee…..”, misma que adaptaron al tipo de música  que se tocaba en la banda municipal  y que  se logro montar muy bien, por todos los músicos, fué tal su éxito que era la canción más solicitada por parte del  público , pero al  director no le gustaba y su enojo era muy grande porque se ejecutaba este tema musical; nadie sabía el por qué  había tanto enojo  por parte del director a este tema musical, tiempo  más tarde, se  supo  que esta   fue la canción que le dedicara por varios meses continuos su amante  más querida de Garagoa, después de que un día se dio cuenta que el músico tenía varias sucursales en los pueblos de las provincias de Márquez, Lengupá y Rovira, pero que además era casado y que había estado preso por  bigamia.  

El  famoso director, fue liquidado  laboralmente y  una vez más quedo el barco sin capitán, pero la banda municipal siguió ensayando y haciendo presentaciones aun sin director, a los pocos días, falleció don Heliodoro Gómez;  y su esposa Ramona pidió a los integrantes de la banda de músicos que tocaran en la iglesia y en el entierro desde la salida de la  iglesia hasta   la última morada en el cementerio local,   este  tipo de entierros  no son comunes en Miraflores; ya que el acto de la muerte es un acto muy solemne, triste y  nunca acompañado por músicos durante  la procesión al cementerio; luego  nuestro pueblo  en ese momento tomo un  parecido con  NEW ORLEANS en donde la mayoría  de entierros se hacen al ritmo de una banda musical que va tocando durante toda la procesión música  variada  que va desde   las marchas fúnebres, hasta los ritmos  preferidos del muerto.

Luego ese día fue muy especial,  y diferente porque  todos los pobladores quedaron atónitos  de ver cómo era que  un entierro   estuviera acompañando con  la banda municipal, las viejas beatas se echaban bendiciones, agachaban la cabeza y salían corriendo a   rezar el rosario y a murmurar lo profanos que eran los familiares del muertico; mientras los integrantes de la banda seguían tocando mas fuerte a pedido de los dolientes todos sus  temas musicales como si  fuera un  carnaval.
banda  juvenil municipal de Miraflores.

Después de este  y muchos más episodios,  la banda municipal de Miraflores, se desintegro por  otro largo tiempo hasta que nuevamente es  reorganizada bajo la dirección del Maestro Germán Salinas,  hijo de Miraflores , quien saco a delante la banda de músicos juvenil,  logrando  un nuevo posicionamiento en el ámbito  musical dentro del departamento y  como siempre  dándonos alegría  y orgullo a todos los de Miraflores al ver todo ese talento joven representar con ímpetu a nuestro municipio en muchos certámenes.

La banda de  músicos de Miraflores, o banda municipal del pueblo, formada con mucho sacrifico y esfuerzo; tuvo múltiples anécdotas algunas llenas de alegría, otras llenas de tristeza pero todas  con orgullo grato de  haber sido vividas por sus integrantes,  y hoy recordadas de manera nostálgica por los mismos.
Banda Municipal de Miraflores Boyaca.

Mientras los músicos vivían todas estas  aventuras; nosotros los que jodíamos y gozábamos de su música solo sabíamos decir  ¡Soplen babosos que para eso se les paga!, desconociendo por completo todo el esfuerzo y todo el empeño  de quienes querían que la música fuera parte de nuestra cultura local; gracias a  estos músicos invaluables, y a  el apoyo recibido por parte de algunos mandatarios  de turno   pudimos  gozarla, disfrutarla, sentirla y ahora recordarla, admirarla y  extrañarla.

Nuevamente un agradecimiento a Manuel Romero, por toda su colaboración y aportes a este relato musical.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Ay la música! Cuanta alegría y nostalagia juntas. Precioso relato con detalles, nombres ya olvidados, y títulos y méritos guardados en la memoria. Invito a los lectores a comentar y a leer y releer estos escritos.

Unknown dijo...

Excelente artículo... Va mas allá de lo superficial, trayendo a la memoria historia y alegría, destacando el valor humano que hay detrás de la música. Tuve la gran oportunidad de participar en la banda del municipio y me enorgullece leer este buen contenido.