70 AÑOS DE HISTORIA
FORMACIÓN, CULTURA Y
SABIDURÍA
Colegio Sergio Camargo 19...? Fot. Aut. Desconocido. |
En 1942, en un afortunado 27 de septiembre, nace en Miraflores el glorioso
Colegio Sergio Camargo que toma su nombre en honor al General nacido en Iza –
Boyacá el 26 de diciembre de 1832 pero que por esos designios del destino
fallece en Miraflores el 27 de septiembre de 1907
Al igual que este experimentado combatiente, nuestro colegio, durante
largos pero bien llevados 70 años de funcionamiento, ha librado
múltiples batallas, buscando siempre la excelencia, y formando a cientos
de jóvenes que se abren campo aguerridamente dentro de la sociedad local,
nacional e internacional.
Panoramica, fot. Autor desconocido. |
Por sus salones y corredores han transitado muchos educadores, trabajadores
y cientos de estudiantes, que, generación tras generación llevamos
en el corazón el orgullo de haber sido formados en su seno, o haber pertenecido a esa honrosa nómina, acumulando en la mente los recuerdos de
múltiples vivencias que de alguna manera nos marcaron para siempre.
Bloque de Aulas Fot Autor desconocido. |
En el colegio, muchos vivimos los mejores años de nuestras
vidas, ingresamos siendo niños y salimos siendo hombres y mujeres
orgullosos de haber alcanzado la meta de ser bachilleres.
Los recuerdos inolvidables en sus amplios y sencillos salones, de los
laboratorios de física, química con lo elemental para aprender, pero que se han
ido adecuando con el pasar de los años y obedeciendo a las nuevas
necesidades las aulas especializadas de informática y robótica, que han
contribuido al desarrollo tecnológico y científico de las nuevas generaciones,
permitiéndoles traspasar fronteras valiéndoles importantes reconocimientos
nacionales e internacionales.
Vista General Fot Ciro Franco. |
Mis más intrínsecos recuerdos me transportan a los salones en donde
librábamos batallas campales con semillas de pomarrosa, tiza, cascaras de
naranja o almohadillas llenas de tiza, a los campos deportivos; la cancha de
baloncesto, que además servía de lugar para la formación de los
estudiantes quienes corrían llevados por el sonido inconfundible de la campana
de bronce que con la puntualidad de un reloj suizo era tocada por
Guillermo. Allí jugábamos diariamente basquetbol, voleibol y
otros juegos a la hora del descanso; la cancha de fútbol, en donde
formábamos para las izadas de bandera, jugábamos fútbol, corríamos, o nos
castigaban dando tres o cuatro, y hasta mas vueltas, cuando hacíamos una
pilatuna o llegábamos tarde a la formación matutina; también en la
que ensayábamos las marchas, que acompañadas de la banda de guerra se
convertían en el acontecimiento esperado para la conmemoración de las fiestas
patrias en el municipio.
Presentación Patria Fot Ligia Ballesteros. |
Como olvidarme de la piscina, que se hizo con el
esfuerzo y la mano de obra estudiantil, para convertirse en el orgullo y
deleite de todos, aquella que disfrutamos nadando, tomando el sol, y
admirando los sensuales y bellos cuerpos de las bañistas
mientras se contoneaban o nadaban, o bien por el “huequito” que se hizo en la
pared del vestier con el propósito de ver las nalgas y lactas peladas de
muchas.
Otros lugares recordados como la estación de meteorología, que siempre fue
un enigma, muy cerca de la cual en alguna época quisimos practicar Beisbol,
allí, improvisamos un diamante para la práctica incipiente de este
deporte, la caseta de la cooperativa en donde a la hora
del descanso hacíamos un tumulto y a gritos pedíamos gaseosa con roscón y
otras golosinas, la sala de profesores, en donde guardaban los
tableros de ajedrez, y los balones para la práctica de deportes y por donde
podíamos observar si ya había llegado o estaba allí sentado tal o cual
profesor, los amplios patios y corredores, por donde caminábamos viendo
las lindas estudiantes uniformadas con sus ceñidas blusas y falda a
cuadros, corta, mostrando las piernas, con medias blancas y zapatos
negros; a los hombres no nos imponían un uniforme de diario ¡bueno, en esa
época!, solo debíamos mantener bien lustrados los zapatos, y un corte de
cabello corto, adecuado para la época.
Estudiantes en la Frontera Fot Autor desconocido. |
La ceiba milenaria, testigo muda de alegrías y
tristezas, de amores furtivos, inocentes, de encuentros amorosos
apasionados y ardientes, punto de escondite de alumnos cuando se hacia
alguna pilatuna, pero también punto de observación distante por
parte de profesores y estudiantes, El camino de la entrada al
colegio en donde sembramos muchos árboles, como pinos. Ocobos y
otros, a los vecinos de las casas por donde nos escapábamos o por
donde entrabamos cuando llegábamos tarde.
Camino de entrada principal. Fot aut. Desconocido. |
Con gratitud son recordados los trabajadores que hacían parte de
la nómina del colegio y lo mantenían en orden y aseado o se ocupaban de llamar
puntualmente a estudiantes y docentes con el tin – tan de la campana como
Marina, Trina y Guillermo, mismos que por todos sus años de trabajo, ya eran
parte del inventario general del instituto.
Marina Fot albun de su familia. |
Los profesores de diferentes áreas, la mayoría licenciados, profesores que
en medio de muchas limitantes nos enseñaron y transmitieron
su conocimiento, unos legendarios y apreciados como el profesor
Salvador Rodríguez y su hermano Fernando, Quico Martínez quien llegó
desde Corozal –Sucre-, Ramón Díaz, el profe Copete, Salóm,
Julio Pulido, Amanda Roa, Carmenza Valcárcel, Alcibíades Camacho, el profe
Mendoza, , Graciela Alvarado, Elisa Castellanos, el profe Prieto,
Cibel Camacho y su esposa Anita, Raúl Quintero, Susana Barreto y Crisanta
López, entre muchos mas; otros legendarios pero no tan apreciados
como el profe Lagos, “el castalia”, Manuel
Villamarín, Bertha Buitrago, Omaira Barrera, “casco de buey”, Miguel
Yenguimochi, “el mochilón”, "la cipote vaina" y otros mas que no
recuerdo.
Toda esa diversidad cultural de los educadores, de muchos
rincones del país, las diferentes formas de ver la vida, y la distinta
formación de ellos, se encargaron de nuestra formación y fue,
precisamente, esa diversidad y exuberancia, la que nos permitió
aprender no solo de la academia sino de la vida misma, sin
distingo, con ansia y con lucha para enfrentarnos y poner el pecho
al mundo, allí en nuestro campus; fue esa universalidad de conocimiento, cultura,
costumbres, formas de pensar y otros, los que hicieron que cada uno de nosotros los alumnos decidiéramos nuestros caminos y destinos; porque a decir
verdad hasta militares como el profesor Vicente, tuvimos dándonos clases y no precisamente sobre milicia.
Orgullosa estudiante. Fot Autor desconocido. |
En cuanto a los estudiantes, muchos, cada uno con sus propias
historias y vivencias, con su grupo de amigos y compañeros de curso y de
colegio, que fueron llenando día a día, año tras año las paginas
blancas de la historia del colegio durante estos setenta años.
Fuimos los estudiantes esa masa que pudo criticar, defender, exigir
derechos y deberes, por parte del municipio, el departamento y el estado, como
en cierta ocasión, cuando querían mover a un profesor,
académicamente bien formado y con valores morales y éticos por otro
de dudosa reputación, entonces hicimos en un esténcil un
comunicado que imprimimos en el mimeógrafo del Dr. Rafael Barreto,
mismo que nos valió un llamado de atención fuerte, pero también el
logro de no dejar mover a Quico Martínez de su lugar.
Otras acciones similares como cuando debimos dar la pelea para
que fueran nombrados profesores para diferentes áreas, o para pedir
presupuesto y dotación para los laboratorios de física y química,
acciones que emprendimos con manifestaciones públicas por la calle y frente al
palacio municipal; en otras ocasiones con la toma de la parroquia San Joaquín
de Miraflores, acompañada de una huelga de hambre, que fue burlada por
cuenta del muchacho que a diario se pavoneaba frente a los huelguistas con un
canasto lleno de roscones frescos, y su agradable olor traicionaba el
mediático ideal y así se colaba por los sentidos de esos cuerpos hambrientos
que no soportaban y debían consumir algo mientras terminaba
la operación , misma que tuvo un impacto social no solo a nivel local y regional
sino nacional, hasta allí, al parque principal de Miraflores y al
templo San Joaquín llegaron los reporteros de Caracol Radio a realizar
su noticia que reflejaría la inconformidad y el motivo de esta toma
pacífica al templo y, que como era de esperarse, concluiría con la atención y
pronta resolución de la problemática y, de manera favorable, a los intereses
del estudiantado.
Parroquia San Joaquin. Fot Myriam Vargas. |
El colegio ha formado con orgullo, y decisión a
muchos estudiantes destacados en actividades académicas y
deportivas, hoy profesionales íntegros, sobresalientes y dignos, tuvimos por
varios años representación en las justas deportivas de los intercolegiados departamentales
y fuimos destacados en disciplinas como natación, fútbol
y baloncesto, carreras de los 100 metros y otras, a pesar
de las limitaciones económicas tanto del deportista como de la institución
misma.
En los últimos años, hemos conocido con orgullo verdaderos campeones
mundiales de la informática y la robótica; estudiantes que se han
destacado en los resultados de las pruebas de estado ICFES, frente
a otros colegios de mayor jerarquía y tradición a nivel nacional;
el Sergio Camargo, además, es el colegio con el más alto porcentaje de
egresados profesionales de toda la región, estudiantes que han
llegado a las aulas de universidades públicas y privadas con
ganas de triunfar, con ganas de aprender, de terminar sus estudios y de
servirle al país.
Campeones de robotica fot. Myriam Vargas. |
Nuestro grupo generacional ingresó al colegio entre el año 1970
y 1979 siendo la gran mayoría unos niños entre los 11 y los 13 años como
máximo, con muchas expectativas, fuimos de las promociones que impusieron un
ritmo y un récord dentro de la historia contada hasta esa
fecha, en las que mayor cantidad de estudiantes entramos a las
universidades públicas y privadas dentro y fuera del país, fuimos parte
de esa generación que desde los primeros años tenían el suficiente criterio
para defender lo nuestro, defender el derecho a recibir educación;
esa generación que vivió, sintió, disfrutó y rompió reglas y
paradigmas , pero que siempre actuó con la responsabilidad de estudiar,
de cumplir a cabalidad y con seriedad sus compromisos académicos, familiares y
personales.
Bachiller 1980 fot Hector Roldan. |
Pertenecemos a esa generación que evolucionó con el mundo, con los cambios,
tecnológicos, pasamos del tocadiscos de baterías o pilas a la grabadora, de la
grabadora al equipo de sonido, de los casetes al CD, al ipod…
Pasamos del teléfono de manivela, al de disco, al
celular y al iphone, vivimos la época de PEACE AND LOVE, pasamos de
la música de tiple y guitarra a la música de Hendrix, los Beatles,
Santana, entre otros; bailamos al ritmo de Bovea y sus vallenatos, del Cuarteto
Imperial, Alfredo Gutiérrez, Los Melódicos, los ocho de Colombia,
Los Tupamaros, Galaxia 2000, pasando por una amplia gama de vallenato,
Rock, Metal, y demás, tuvimos la fortuna de ver, sentir y vivir los
primeros cambios generacionales relacionados con Rock and
roll, drogas y sexo, pasar de los tabúes ancestrales, a la
libertad de Ublime.
Escudo actual. del Sergio Camargo. |
Mi colegio, nuestro colegio y el de las futuras generaciones:
el Sergio Camargo, fue, es y será siempre un nido de
enseñanza, un manantial de conocimiento, un mundo perdurable de
aprendizaje, un universo infinito de recuerdos indestructibles
que de generación en generación desde hace 70 años vive en todos
quienes hemos tenido el privilegio de ser alumnos o de quienes han puesto
su vida al servicio del mismo como trabajadores o empleados de esta
gran institución y vivirá por muchas generaciones mas mientras exista
Miraflores.
¡FELIZ ANIVERSARIO GLORIOSO SERGIO
CAMARGO!
Desde acá evoco con nostalgia los años dorados que pase allí y
ansío retroceder el tiempo para volver a disfrutar esos inolvidables y
maravillosos años juveniles, en donde sus aulas, patios y
contornos, sus paredes, techos, puertas y ventanas, la ceiba y demás,
fueron los testigos directos y mudos de mis primeras declaraciones de amor,
de mis primeros besos y caricias, de muchos amores reales y platónicos, de muchas amigas admiradas, de muchos amores emprendidos y de mis mas grandes sueños y anhelos de ser adulto y profesional
rápidamente.
** Especial agradecimiento en este relato a Angela Patricia Garzon y a todos los propietarios de las fotografias
2 comentarios:
Felicitaciones a todos los sergistas y mirafloreños, orgulloso de ser egresado de este inolvidable lugar.
Muy bien. Gracias por este viaje a toda velocidad.
Me parece muy bien que haya recordado a Marina, Trina y Guillermo, que en nuestra época fueron los que hicieron que la maquinaria del colegio funcionara.
Publicar un comentario