Trompos,
bolas, pipos, palitos y monas.
Juegos Infantiles. |
La
primera forma de capitalizar en la escuela, fue invirtiendo, en títulos valores, representados
en bolas de cristal, trompos, pipos, palitos de helado o
colombina y las monas o cromos de los diferentes álbumes de colección del
entonces.
Con la compra, venta y diferentes transacciones, que se hacían en la escuela y en las calles de Miraflores, mientras se adelantaba
un juego, se ganaba o perdía dinero
representado en nuestros títulos valores. Luego
jugar era un riesgo que todos corríamos, y en el
que sabíamos perfectamente el valor de perder, o ganar.
Todos los títulos valor, eran dinero en efectivo, que se podía hacer real de manera inmediata, y con
la venta de los mismos, se conseguía el
dinero suficiente para comprar roscón, gaseosa, alquilar triciclo, cuentos, ir a matinée los domingos, comprar los cromos o monas, chocolatinas Jet, entre otros.
Como
en la sociedad actual, cuando niños habían
pobres, ricos y millonarios, y su capital dependía de cuanta cantidad de
bolas, cuantos trompos de buena calidad,
cuantos álbumes llenaba, cuantos cromos o monas
guardaba, cuantos palitos y
cuantos pipos tenia. Obviamente lo mas comercial del entonces eran los trompos
y las bolas, y alli era a donde se dirigían las acciones, pues eran los mejores
títulos valor, lo s otros aunque igual tenían valor, no eran lo
suficientemente valiosos para la inversión , sin embargo un buen inversionista
tenia acciones de todas y en épocas de crisis, sacaba al mercado lo que hubiera disponible.
Los pobres, tenían entre 10 y
50 bolas de cristal, un trompo, unos pocos cromos, muchos palitos de helado, y de colombina y muchos
pipos.
Los acomodados,
tenían entre 250 y 300 bolas, dos
trompos amarillos, uno sedita, y liviano para jugar y otro un poco más pesado y viejo generalmente con herrón
de hacha para poner y para dar los
Quines.(golpes que se dan con un trompo
amarrado de una piola al trompo del perdedor que se coloca en el piso), Pacha (
cuando quedaban pegados) se remacha, y
astillita ( cuando se le sacaban
astillas) vuelve a cero. Luego el perdedor pagaba, con trompos, con bolas o con
lo que tuviera, si se apostaba algún título valor.
Los ricos, tenían entre
350 y 500 bolas, y dos trompos seditas, una marrana ( trompo
grande y pesado) uno más viejo y pesado, para poner en el juego en caso de perder, y otro
adicional para cobrar con su respectivo herrón de hacha, cientos de cromos o
monas, y unos cuantos palitos de helado y colombina mas unos pocos pipos. Estos ricos invertían en
juegos más grandes, paraban casita y
comercializaban más fuerte y seguido
todos sus títulos valores.
Los
Millonarios tenían entre 500 y
1000 bolas de cristal, de diferentes
colores, tres trompos, seditas, una o
dos marranas, mismas que ponían cando perdían y dos trompos para cobrar, dos o tres álbumes de cromos, cientos de cromos, muy poco o nada de palitos
de helado y colombina y casi nunca
pipos. Algo que les caracterizaba era su
valiosa riqueza representada en maras (bolas o canicas) de diferente tamaño, y
colores, muy experimentadas que no solo daban suerte, sino que eran un símbolo de
riqueza y opulencia por su valor
incalculable y eran como el cariño verdadero ( ni se compra ni se vende) Las inversiones
de estos millonarios eran entre
millonarios y pocas veces con
algunos ricos y nunca con los acomodados y menos con los
pobres, se apostaba y jugaba en grande, pagándose sumas exorbitantes
representadas en los títulos
valores, de gran valor comercial , es
decir solo bolas, trompos
y cromos o monas.
Pipos y Bolas |
Con
el juego de las bolas de cristal y el
trompo, en la escuela se ganaba o perdia
el dinero de las onces, y fue esa la
primera forma de riqueza en la niñez. Su
precio era de tres bolas por Cinco
centavos, y su comercio era muy fluido, era el mejor titulo valor del entonces.
Los más
pobres y los acomodados, armaban juegos separados en los que no había casi barra ni mirones, pues no era
interesante ver jugar pequeñas sumas y menos
con pipos, esos hermosos frutos de una palma, muy bien redondeados que suplían
a las bolas de cristal y que la naturaleza nos permitió tener sin necesidad de
ir al almacén y poderlos disfrutar como
si se tuviera la mejor de las maras, con un plus adicional, que igual servían como pasabocas. Pues su
almendra no solo es nutritiva sino de
un sabor inigualable.
En
varias ocasiones del año la bolsa de valores sufría grandes caídas, y los títulos
valores perdían precio, y especialmente los ricos y millonarios
quedaban en la ruina, evento que ocurría cada vez que los profesores
decomisaban , bolas, trompos, palos
cromos , pipos y demás, cuando
esto ocurría la tragedia era de incalculables consecuencias, y se
reflejaba en los siguientes días cuando todos trataban de recuperar nuevamente
su capital, entonces todos éramos
iguales y nuevamente empezaba el
ciclo de acumulación, sin embargo producto de esta lucha por recuperar lo
perdido, se daban tremendas peleas entre
compañeros. Una que recuerdo fue aquella
en la que Nelson Rivera se enfrento con Julio Pulido, cuando uno paro casita, y el otro
no lo dejaba, ese día se enfrentaron dos grandes a puños, en medio
de esta pelea, entro una tercera persona,
Héctor Rivera Hermano de Nelson y entre los dos golpearon a Julio Pulido quien debió
rendirse ante el feroz ataque; es que los asuntos del dinero son
complicados.
Luego
cuando nuestra bolsa de valores era intervenida, la recuperación financiera se
hacia lo mas pronto posible, y esa ocurría
de varias maneras, una comprando
bolas tres por cinco centavos a
los que tenían reserva en la casa, comprando más en los diferentes
almacenes, intercambiando cromos por bolas, juagando y ganando con las pocas reservas o en ultimas
con el tumbis que hacían los más osados y vivos a los mas indefensos, hasta que
pasado un corto tiempo, nuevamente volvía la normalidad financiera a nuestra bolsa de
valores, a muestro “World Center” y “Wall
Street” local.
Habían
muchos mas juegos que hacían parte de
las inversiones, como el cuadrado , el hoyito y el piti, entre otros, tal como sucede en las
bolsas de valores del mundo no eran tan comerciales y la apetencia de los inversionistas por los
mismos era de muy poco interés. Sin embargo los disfrutábamos muy sanamente
por que el interés más grande que era el de divertirnos y pasar nuestra
niñez felizmente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario